Asimetría facial / mandibular: qué es y tratamiento

Las asimetrías de la cara son un rasgo frecuente, comúnmente asociado a algún tipo de maloclusión. Si bien las caras no son totalmente simétricas al 100% (puedes probar con una foto de frente y hacer una imagen especular de una hemicara), cuando estas se hacen llamativas son un motivo común de consulta. Puede afectar solamente a la mandibula, al mentón o a todo el complejo maxilomandibular, por lo que la cara y los dientes parecerían torcidos.

La asimetría facial puede presentarse sola o formando parte de algún síndrome como puede ser la microsomía hemifacial (una mitad de la cara más pequeña y menos desarrollada que la otra mitad) o hiperplasia condilar. También puede aparecer tras haber sufrido algún tipo de traumatismo facial especialmente en la infancia.

Cuando aparece asociada a algún tipo de maloclusión (prognatismo, mordida cruzada u otro) se trata de un problema muy lesivo para la articulación temporomandibular (ATM), pues la mordida se produce de manera no balanceada y con el tiempo esta articulación se puede deteriorar. Además a nivel estético es un motivo de queja importante por la gran repercusión que tiene en nuestro rostro.

¿Cómo diagnosticar y tratar las asimetrías faciales?

Si bien el diagnóstico a priori es básicamente clínico, los modernos escáneres tridimensionales tienen hoy en día un papel fundamental tanto en el diagnóstico como en la planificación del caso pues nos permiten predecir con gran exactitud los movimientos a realizar.

La cirugía mono o bimaxilar (con o sin mentoplastia) suele ser el tratamiento de lección asociado a ortodoncia, reposicionando los huesos en las 3 dimensiones del espacio.

El grado de satisfacción de los pacientes tras estos tratamientos es muy elevado, mostrando una importante mejoría de los síntomas, estética y estabilidad de mordida.

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